Anécdota del posible primer contacto del Príncipe Felipe con un ordenador

En estos días se cumple el cuarenta aniversario de nuestra Escuela, nueva denominación del original “Facultad de Informática”. En esta circunstancia, y como prolegómeno a un anecdotario histórico que se incluirá en el blog de historia de la Facultad  en el que se podrá contar, por ejemplo, las visitas de pioneros de la Inteligencia Artificial como Herbert Simon, Marvin Minsky o John McCarthy a la Facultad, lo que constituyó un auténtico hito en la historia de nuestro centro, queremos adelantar ya una primera anécdota, en coincidencia con el nombramiento hoy, día 8/6/2018, de la profesora Barbara Liskov como doctora Honoris Causa de la UPM. Esta primera anécdota se refiere al más que probable primer encuentro de nuestro rey Felipe VI con el mundo de la informática. Fue un pionero de la facultad y de la informática científica en España, el catedrático jubilado D. Fernando Alonso Amo, el que nos ha contado esta anécdota, tan curiosa e interesante a la vez.

“Un hecho significativo se produjo tras el conflicto de la Marcha Verde en el Sahara, que España había cedido a Marruecos y Mauritania. Como consecuencia, se analizó en el CESEDEN (Centro de Estudios Estratégicos de la Defensa Nacional) la repercusión económica que podía tener en España este hecho. A tal efecto, fuimos convocados para participar en esta comisión yo (como Jefe de Estudios del CPD del Ministerio de Educación y Ciencia) y el coronel Avanzini, del Alto Estado Mayor. El objetivo era comprar en el centro de investigación de Batel (Suiza) un programa informático que simulara diferentes escenarios econométricos de la economía española, para lo cual Avanzini y yo nos desplazamos a Batel para su adquisición.

Para adecuar este programa al problema español se instalaron dos ordenadores en el Palacio de la Zarzuela, uno conectado con el  CPD del Ministerio de Educación y Ciencia, que yo controlaba, y otro conectado al Alto Estado Mayor, que controlaba Avanzini. Durante aproximadamente un mes, ambos tuvimos que trabajar por las tardes en el Palacio de la Zarzuela para poner a punto en cada ordenador en paralelo (por si fallaba alguno) el programa adquirido en Batel. Allí conocimos personalmente al Rey Don Juan Carlos (que se interesó vivamente por lo que estábamos haciendo) y a la Reina Doña Sofía.

Finalizada la puesta a punto del programa, la comisión del CESEDEN hizo una presentación al Rey de los diferentes escenarios econométricos. La comisión nos daba  los datos del escenario que querían simular y nosotros los pasábamos por los ordenadores devolviendo a la comisión los resultados de los mismos.

Una anécdota curiosa de ese día fue que el Príncipe Felipe (actual Rey Felipe VI), entonces un niño, se acercó muy interesado al lugar donde estaban los ordenadores. Allí le explicamos en qué consistía un ordenador ⎯seguramente nunca había visto uno⎯ y cómo trabajaba. Después le regalamos un Cristo punteado en una impresora. ¡El Príncipe se marchó muy impresionado y contento!”

D. Fernando Alonso Amo